Echa tanto de menos su luna
Que muriendo de día en cuna
Renace al alba por ella.
Entre todas la más bella
Sigilosa, rauda y oportuna
Sin dejar esperanza alguna
Desaparece esta luna sin huella.
Enloquece el Sol, frustrado
Por estar de la vida enamorado
Y ser éste su delito.
Si creen que la locura es bendición
Firmo, loco, mi rendición
Por dejar de ser bendito.